El futuro de los mares europeos, 6 de marzo de 2024
Charlina Vitcheva, Directora General de la DG MARE de la Comisión Europea, fue la anfitriona de esta jornada de reflexión sobre futuros posibles y deseables. A la luz del próximo nuevo ciclo político, sea cual sea la composición del Parlamento Europeo y de la Comisión, los nuevos titulares tendrán que hacer frente a la triple crisis de la pérdida de biodiversidad, la contaminación y el cambio climático. Se puede añadir como cuarto reto el desarrollo de soluciones integradoras y socialmente equitativas.
Manuel Barange, Director General Adjunto de Pesca de la FAO, pronunció un discurso en el que resumió el panorama mundial. Lamentó el repunte del hambre, que afecta actualmente a más de 700 millones de personas en todo el planeta. Mientras que la producción de productos del mar silvestres y de la acuicultura permitía actualmente alcanzar una cifra nominal de 20,2 kg de pescado y marisco por persona y año, los países africanos sólo alcanzaban la mitad. Si el continente quisiera alcanzar el nivel actual de valor nutritivo del pescado, se necesitaría un aumento del 284% para el año 2050.
La acuicultura consistía sobre todo en peces de agua dulce relativamente bajos en la red trófica, como las carpas, que representaban el 62,2% del total mundial Pero la sostenibilidad seguía siendo una preocupación en la acuicultura, sobre todo de especies carnívoras, como el salmón.
Este año, cuando las Directrices voluntarias para garantizar la sostenibilidad de la pesca artesanal celebran su décimo aniversario, nunca se insistirá lo suficiente en su importancia para los medios de subsistencia, la seguridad alimentaria, el empleo y las culturas marítimas. Hay que tener en cuenta que el comercio de productos pesqueros es la mayor fuente de ingresos para muchos países de renta baja y media (PRMB).
La integración de la conservación de la biodiversidad, la restauración de los océanos y los objetivos globales para acabar con el hambre deben encabezar las agendas políticas y operativas.
En su respuesta,Charlina Vitcheva señaló que, con el aumento de las tensiones en todo el mundo. Además, los postes de la portería en asuntos marítimos se han movido. A modo de ejemplo, mencionó: Estados Unidos y otros países que amplían considerablemente su plataforma continental, Noruega que inicia la explotación minera de los fondos marinos a pesar de presidir el Panel Oceánico de países que pretenden aumentar la protección y el uso sostenible de los océanos, China que despliega su formidable flota a distancia no sólo en África Occidental y a lo largo de la costa sudamericana. Europa tenía sus propias tensiones y luchaba por seguir siendo un socio internacional estable para avanzar en la agenda esencial de la restauración. Argumentó que era necesario prestar más atención a las dimensiones sociales y económicas, incluido el envejecimiento de la población en general y las dificultades para atraer a los jóvenes, por ejemplo, a la pesca cuando los recursos están disminuyendo. Además, la competencia por el espacio de muchas actividades diferentes no está facilitando la gestión de las Zonas Económicas Exclusivas.
Para reflexionar sobre estos y otros retos, se programaron cuatro sesiones de debate temático en grupos más pequeños, en las que se trabajó sobre las mismas preguntas de sondeo. Los temas fueron
- motores globales
- economía
- sociedad
- innovación.
A todos los participantes se les asignó un grupo con distintos participantes para que trataran cada tema y aportaran los principales mensajes para la planificación futura. A continuación, los ponentes y moderadores de cada grupo reunieron estos puntos clave y cuatro ponentes principales compartieron la síntesis de cada tema en sesión plenaria.
En todos los temas, literalmente, la necesidad de la participación ciudadana y el fomento de enfoques integradores surgió como un hilo conductor flanqueado por otros más específicos para cada tema y región de toda Europa. Más de 100 personas participaron en los debates de grupo y aportaron sus experiencias y puntos de vista.
La Comisión promete documentar el proceso y publicar un resumen tras la reunión.