El planteamiento de las misiones, adoptado por las instituciones europeas, pretende hacer frente a los grandes retos de la sociedad facilitando la movilización de muchos agentes que realizan un trabajo transdisciplinar y combinando una amplia gama de instrumentos de financiación desde el nivel europeo al local. El segundo Foro de la Misión, celebrado el 5 de marzo e inaugurado por el Presidente del Consejo de la Misión, Pascal Lamy, puso de manifiesto que, más allá de las maravillosas aspiraciones, en el orden del día figuraban la acción real y los aspectos más destacados del cambio. Toda la semana estuvo repleta de presentaciones y contactos, con una fuerte presencia de mujeres líderes comprometidas que no tuvieron reparos en ir allí donde importaba. He aquí algunas impresiones de los actos.
Lamy se esforzó en centrar la atención de los asistentes en la aplicación de medidas concretas para restaurar el océano y los ríos. Explicó que hace cuatro años la planificación había empezado en serio. El foro de la misión del año pasado seguía siendo en gran medida una aspiración, porque los primeros proyectos apenas empezaban a ser operativos. Pero ahora el marco legislativo estaba en marcha, con la Ley de Restauración de la Naturaleza votada por el Parlamento Europeo como elemento más reciente para poner a Europa en la senda de restaurar el 20% de los ecosistemas degradados para 2030, como póliza de seguro para el futuro en tiempos de cambio climático perturbador, extinciones masivas y demás. Un gran número de proyectos e iniciativas están ahora en marcha, movilizando medios financieros adicionales y más "que los sospechosos habituales", como él dijo.
Un ponente tras otro dieron lo mejor de sí, apoyados por la contagiosamente entusiasta moderadora Katrina Sichel. Las preguntas intercaladas de Slido al público invitaban regularmente a los participantes a dar su opinión a cada paso del programa..
La primera "sesión operativa" se tituló "Restauración de ecosistemas marinos y de agua dulce" y contó con ponentes responsables de aplicar soluciones en los faros de la Misión a partir de acciones de la Carta e invitó al público a comentar y preguntar a través de Slido. Le siguió rápidamente un panel centrado en la eliminación o prevención de la contaminación marina a diferentes escalas.
Dos esfuerzos de larga tradición fueron reconocidos con el Premio Europeo de AMP: la reserva natural de Torre Guaceto, cerca de Brindisi, en Apulia (Italia), y la zona marina protegida de Côte agathoise, en la costa mediterránea francesa.
Las sesiones de la tarde se centraron sobre todo en las oportunidades de transición hacia una economía circular, aunque la mayor parte de ellas aún están en pañales. Varios oradores insistieron en la necesidad de agrupar y acelerar las iniciativas para cumplir los objetivos.
La sesión sobre sistemas de conocimiento permitió vislumbrar cómo los ciudadanos podrían participar en una serie de iniciativas para estimular soluciones integradas, que vayan más allá de las preocupaciones medioambientales y aborden también cuestiones sociales y económicas. La experiencia es que los enfoques estrechos tienen una tracción limitada y resultados subóptimos. También es cierto que con una producción pesquera total en aguas europeas reducida a la mitad, de unos 7 millones de toneladas en 2017 a la mitad en 2021, no hay lugar para la complacencia. La restauración debe intensificarse drásticamente para mantener el consumo de alimentos sanos procedentes de los mares, ya que Europa no puede asumir cubrir indefinidamente su creciente déficit de otras partes del océano mundial.
La última mesa redonda, "La Misión Océanos y Aguas en acción", prestó atención a la participación de los jóvenes y ofreció un recorrido por la coordinación y el apoyo a las cuatro iniciativas faro regionales: Mediterráneo, Báltico-Mar del Norte, Atlántico-Ártico y Danubio. Cécile Nys, del proyecto PREP4BLUE, ilustró los mecanismos de coordinación horizontal y apoyo a la Misión.
A continuación, John Bell, Director Adjunto de la Misión y Director de Planeta Saludable de la Dirección General de Investigación e Innovación de la Comisión Europea, pronunció unas palabras de clausura y animó a todos a mirar hacia el futuro, hacia una puesta en marcha de la misión que sobrevivirá al cambio de guardia tanto en el Parlamento Europeo, con las elecciones de junio de 2024, como en la nueva Comisión, que iniciará su mandato en octubre de este año.
¿Cuál fue la valoración general sobre Slido de la jornada? El momento de la verdad de casi 100 participantes expresando su agradecimiento demostró que, en general, fue un ejercicio que mereció la pena.
El sitio web oficial puede consultarse aquí. Traducción realizada con la versión gratuita del traductor DeepL.com
A continuación, algunas fotos más del fotógrafo de la misión:
El futuro de los mares europeos, 6 de marzo de 2024
Charlina Vitcheva, Directora General de la DG MARE de la Comisión Europea, fue la anfitriona de esta jornada de reflexión sobre futuros posibles y deseables. A la luz del próximo nuevo ciclo político, sea cual sea la composición del Parlamento Europeo y de la Comisión, los nuevos titulares tendrán que hacer frente a la triple crisis de la pérdida de biodiversidad, la contaminación y el cambio climático. Se puede añadir como cuarto reto el desarrollo de soluciones integradoras y socialmente equitativas.
Manuel Barange, Director General Adjunto de Pesca de la FAO, pronunció un discurso en el que resumió el panorama mundial. Lamentó el repunte del hambre, que afecta actualmente a más de 700 millones de personas en todo el planeta. Mientras que la producción de productos del mar silvestres y de la acuicultura permitía actualmente alcanzar una cifra nominal de 20,2 kg de pescado y marisco por persona y año, los países africanos sólo alcanzaban la mitad. Si el continente quisiera alcanzar el nivel actual de valor nutritivo del pescado, se necesitaría un aumento del 284% para el año 2050.
La acuicultura consistía sobre todo en peces de agua dulce relativamente bajos en la red trófica, como las carpas, que representaban el 62,2% del total mundial Pero la sostenibilidad seguía siendo una preocupación en la acuicultura, sobre todo de especies carnívoras, como el salmón.
Este año, cuando las Directrices voluntarias para garantizar la sostenibilidad de la pesca artesanal celebran su décimo aniversario, nunca se insistirá lo suficiente en su importancia para los medios de subsistencia, la seguridad alimentaria, el empleo y las culturas marítimas. Hay que tener en cuenta que el comercio de productos pesqueros es la mayor fuente de ingresos para muchos países de renta baja y media (PRMB).
La integración de la conservación de la biodiversidad, la restauración de los océanos y los objetivos globales para acabar con el hambre deben encabezar las agendas políticas y operativas.
En su respuesta,Charlina Vitcheva señaló que, con el aumento de las tensiones en todo el mundo. Además, los postes de la portería en asuntos marítimos se han movido. A modo de ejemplo, mencionó: Estados Unidos y otros países que amplían considerablemente su plataforma continental, Noruega que inicia la explotación minera de los fondos marinos a pesar de presidir el Panel Oceánico de países que pretenden aumentar la protección y el uso sostenible de los océanos, China que despliega su formidable flota a distancia no sólo en África Occidental y a lo largo de la costa sudamericana. Europa tenía sus propias tensiones y luchaba por seguir siendo un socio internacional estable para avanzar en la agenda esencial de la restauración. Argumentó que era necesario prestar más atención a las dimensiones sociales y económicas, incluido el envejecimiento de la población en general y las dificultades para atraer a los jóvenes, por ejemplo, a la pesca cuando los recursos están disminuyendo. Además, la competencia por el espacio de muchas actividades diferentes no está facilitando la gestión de las Zonas Económicas Exclusivas.
Para reflexionar sobre estos y otros retos, se programaron cuatro sesiones de debate temático en grupos más pequeños, en las que se trabajó sobre las mismas preguntas de sondeo. Los temas fueron
- motores globales
- economía
- sociedad
- innovación.
A todos los participantes se les asignó un grupo con distintos participantes para que trataran cada tema y aportaran los principales mensajes para la planificación futura. A continuación, los ponentes y moderadores de cada grupo reunieron estos puntos clave y cuatro ponentes principales compartieron la síntesis de cada tema en sesión plenaria.
En todos los temas, literalmente, la necesidad de la participación ciudadana y el fomento de enfoques integradores surgió como un hilo conductor flanqueado por otros más específicos para cada tema y región de toda Europa. Más de 100 personas participaron en los debates de grupo y aportaron sus experiencias y puntos de vista.
La Comisión promete documentar el proceso y publicar un resumen tras la reunión.
Taller sobre Parques Azules, 7 de marzo de 2024
Andrea Strachinescu-Olteanu, de la DG MARE de la Comisión Europea, inauguró el taller recordando a los participantes que la actual Comisión está muy interesada en las áreas marinas protegidas (AMP) como medio para ayudar a restaurar el maltrecho océano. Mientras esté en marcha Horizonte Europa, el gran programa marco de investigación, habrá financiación para este objetivo. Es importante mostrar resultados para aumentar las posibilidades de que estos compromisos sean mantenidos por futuros responsables y programas.
Gregory Fuchs, de la plataforma MIP Ocean, recordó algunas de las conclusiones de un taller preparatorio celebrado en diciembre de 2023. A pesar de haber declarado protegidas el 12% de las aguas europeas, menos del 1% lo estaban efectivamente, y el 11% restante, más o menos, eran meros parques de papel. Es importante unirse para cambiar esta situación, a fin de garantizar que los beneficios sociales de unos parques marinos que funcionen de verdad lleguen tanto a los responsables de la toma de decisiones como a los ciudadanos de a pie, trabajando sobre las palancas identificadas.
Alberto Zocchi, de CINEA, la agencia ejecutiva de muchos proyectos que contribuyen a la Misión "Restaurar nuestros océanos y ríos" establecida en 2021, ofreció una visión general. Ayudó a los participantes a centrarse en la acción para navegar por algunos objetivos políticos clave y las principales herramientas de aplicación. De acuerdo con la Estrategia de Biodiversidad de la UE adoptada en apoyo de la Agenda 2030 de las Naciones Unidas con los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), las metas de Aichi en virtud del Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB) y el recientemente adoptado Marco Global de Biodiversidad, el 30% de las tierras y mares europeos deberían estar protegidos para 2030. De ellos, el 10 % debería estar estrictamente protegido.
Se habían negociado cinco misiones para abordar los principales objetivos sociales y utilizando todo tipo de mecanismos de aplicación, desde el nivel europeo hasta el local. La misión "Restaurar los océanos y las aguas europeas para 2030" era una de las cinco. En cuatro subregiones principales, los faros eran lugares para poner a prueba y demostrar posibles soluciones para restaurar ecosistemas muy degradados de una manera social y económicamente sostenible. Entre los principales instrumentos de financiación figuraban el programa marco de investigación e innovación Horizonte Europa, LIFE, el instrumento de financiación de la UE para el programa de medio ambiente y acción por el clima, y EMFAF, el Fondo Europeo Marítimo, de Pesca y Acuicultura de apoyo a la Política Pesquera Común. Un informe de evaluación de unos 800 proyectos financiados durante el periodo 2013-2023 permitió detectar carencias y debería ayudar a orientar los recursos y las actividades en consecuencia.
Con el escenario así preparado, la mayor parte del resto del día se dedicó a conocer de boca de los jefes de proyecto cómo estaban enfocando el mandato de restauración y qué experiencias habían recogido hasta el momento. Una preocupación recurrente era que, para que la restauración tuviera una oportunidad, había que reducir las presiones excesivas que habían provocado la degradación medioambiental y los problemas sociales y económicos que la acompañaban. Como señaló un orador: cuando la casa está ardiendo, no se puede reconstruir, primero hay que apagar el fuego. Entre los numerosos e interesantes informes, sólo podemos mencionar unos pocos y debemos tomar sus conclusiones preliminares con pinzas, ya que la mayoría de los proyectos ni siquiera estaban a medio camino de su programa.
Jannica Haldin, coordinadora de proyectos de HELCOM, la Comisión para la Protección del Medio Marino del Báltico, con sede en Helsinki (Finlandia), llevaba siete meses en el cargo. Ya se tambaleaba bajo las múltiples capas de normas nacionales incompatibles, intereses locales y presiones cada vez mayores sobre el medio ambiente. Estas presiones eran principalmente la escorrentía agrícola desenfrenada que aumentaba las zonas muertas, la pesca excesiva que provocaba el colapso, por ejemplo, de las poblaciones de bacalao y arenque del Báltico occidental, el envenenamiento por la oxidación de los contenedores de munición de la Segunda Guerra Mundial, las redes fantasma en los pecios de los barcos y muchas más. El turismo ha aumentado un 40% en la última década, pero podría llegar a ser aún más importante si el medio ambiente estuviera en mejor estado. Con su contagiosa simpatía y energía, subrayó que lo más prometedor era colaborar con quienes más podían beneficiarse directamente de un Báltico sano y estarían dispuestos a apoyar una legislación que aplicara medidas que redujeran los daños. Su mensaje clave fue: lo mejor es hacer muchas cosas sencillas para que los beneficios sean visibles y así conseguir que más personas y organizaciones se comprometan.
Lorenzo Bramanti, del LECOB-CNRS (Francia), abogó por una mayor participación de la ciencia en la toma de decisiones para mejorar la rentabilidad. Lo ilustró con un ejemplo de arrecifes artificiales, cada vez más populares para restaurar hábitats destruidos por la pesca de arrastre de fondo y en otras zonas como diversificación de hábitats para especies marinas. Son más eficaces si se colocan en zonas con corrientes, las autopistas del transporte de larvas y plancton. La protección debe centrarse en unidades funcionales del ecosistema, no en especies aisladas, aunque esas especies icónicas puedan facilitar la comunicación con el público. Advirtió que una simplificación excesiva en aras de la conveniencia en la comunicación con los ciudadanos o los políticos podría ser contraproducente. Es importante aceptar y asumir la complejidad y el tiempo de recuperación como características clave de los ecosistemas para recuperar su solidez. En resumen, la conservación y recuperación del medio marino deben basarse en protocolos científicos y centrarse en garantizar los beneficios para los ciudadanos, a fin de asegurar el consenso y el apoyo social.
Vedran Nikolić, de la Unidad de Conservación de la Naturaleza de la Dirección General de Medio Ambiente de la Comisión Europea, es un veterano de las negociaciones a distintos niveles, en Europa y en todo el mundo, en torno al Convenio sobre la Diversidad Biológica (CDB). Señaló el gran desfase existente entre las ambiciones de los tratados y la realidad sobre el terreno. El fracaso en la aplicación hizo que las especies se volvieran primero muy raras y luego se extinguieran. Reconoció que se necesita tiempo para implicar a los ciudadanos, pero que es imperativo acelerar significativamente esa implicación. En Europa hay declaradas unas 6.000 áreas marinas protegidas (AMP), la mitad de ellas espacios Natura 2000, pero su estado actual y la eficacia de su gestión no se evalúan sistemáticamente. Sin indicadores de resultados, nadie tenía una buena visión de conjunto.
También insistió en que es esencial reducir la presión humana no sólo en las zonas protegidas, sino también más allá del 30% que se supone que debe quedar protegido en virtud de acuerdos internacionales y regionales. Estas zonas no protegidas formalmente deben gestionarse de forma sostenible y no ser objeto de explotación minera, si se quieren alcanzar los resultados globales. Se mostró convencido de que la nueva ley europea de restauración de la naturaleza tiene las características de un cambio radical, incluso después de haber sido suavizada en las últimas etapas en el Parlamento Europeo y en las negociaciones con los Estados miembros. Su afirmación final fue un estímulo para hacer más y cosechar los beneficios: reduzca la presión sobre la naturaleza y verá los primeros signos de recuperación.
En los debates de los descansos, Mundus maris llamó la atención sobre un nuevo juego de rol sobre cómo hacer funcionar en un país ficticio un Área Marina Protegida potencialmente disputada. Este juego de rol es la principal tarea de nuestra actual becaria, Monica Facci, estudiante de máster en humanidades medioambientales en la Universidad Cà Foscari de Venecia. Aprovechando la experiencia en el público y mediante entrevistas con diferentes partes interesadas, desarrollará el material para los personajes que los jóvenes adultos de escuelas o universidades pueden personificar para adquirir algunos conocimientos sobre la protección de la biodiversidad y las diferentes posturas ante las AMP. Igualmente importante es la exposición emocional durante una deliberación respetuosa moderada para desarrollar un consenso social. Tras las pruebas, el material estará disponible para quienes deseen, por ejemplo, realizar el juego de rol para el Día Mundial de los Océanos, el 8 de junio o en cualquier otra ocasión. Contacto info[a]mundusmaris.org.
Varios oradores pusieron de manifiesto que el solapamiento de legislaciones sectoriales representaba un obstáculo formidable para la adopción de normas más integradas que pudieran lograr un mejor equilibrio entre costes y beneficios para las personas y la naturaleza. De todas las regiones de Europa, los oradores aportaron mensajes y experiencias similares: comprometerse con los municipios, los pescadores, los ciudadanos de a pie, con todos los que se ven afectados por la salud de los océanos. El conocimiento es necesario, pero no suficiente. Necesitamos el compromiso de los corazones y las mentes. Empezar por detener o reducir las presiones, encontrar soluciones para restaurar los hábitats locales, mostrar los beneficios de un medio ambiente sano.
Emanuel Goncalves, científico jefe y miembro ejecutivo del Consejo de Administración de la Fundación Océano Azul, insistió en la necesidad de modificar el artículo 11 de la Política Pesquera Común, ya que la práctica ha demostrado la extrema dificultad o incluso imposibilidad de adoptar medidas de protección en virtud de la legislación medioambiental si otro Estado miembro de la UE tiene intereses pesqueros en la misma zona. Afirmó que teníamos que hacer frente a las crisis existenciales de la pérdida de biodiversidad y el cambio climático, por lo que seguir arrastrando los pies no era una opción y pidió una transformación acelerada, ya que simplemente no teníamos otros 40 años para proteger otro pequeño porcentaje del océano como lo habíamos hecho en el pasado.
Al término de una estimulante jornada, Elisabetta Balzi, Jefa de la Unidad de Océanos y Aguas de la DG de Investigación e Innovación de la Comisión Europea, anunció que se avecinan más oportunidades para poner en práctica lo aprendido durante los intercambios: la próxima convocatoria de propuestas se centrará en las zonas azules protegidas y en cómo hacer que funcionen.
Alfabetización oceánica para todos, 8 de marzo de 2024
Qué buen comienzo con la actuación improvisada de unos cómicos que llamaron a su compañía "Improbably Performance". Representaron los "argumentos" y opiniones, a menudo absurdos y contradictorios, que se pueden encontrar en algunos canales de las redes sociales, como si quisieran preguntar al público: "¿estás bien preparado e informado o corres el riesgo de caer en alguna patraña ingeniosamente presentada?". Y lo que es más importante, sus acrobacias aparentemente desenfadadas también invitaban a divertirse y a no deprimirse por los informes cada vez más dramáticos sobre el estado del medio marino y los motores y efectos del cambio climático. El humor, después de todo, es una buena protección contra el derrotismo y una buena carcajada nos da a todos energía para encontrar nuevas respuestas a los retos.
A continuación, Charlina Vitcheva, Directora General de la DG MARE, intervino en una mesa redonda con jóvenes defensoras de los océanos: Rada Pandeva, del Proyecto Thalassophile, Stavrina Neokleus, de Surfrider Europe, y Leitizia Artioli, del Pabellón del Cambio Climático de Venecia. Por desgracia, todas las panelistas pronunciaron unas declaraciones demasiado ensayadas, que habrían tenido más fuerza con un poco más de espontaneidad. Sin embargo, eso no redujo la pertinencia de los mensajes.
En la sesión 1, dedicada a la alfabetización oceánica como condición previa para una economía azul sostenible, se plantearon preguntas sobre las condiciones clave que pueden ayudar a conseguir una economía azul sostenible, basándose en la experiencia adquirida en el refuerzo de la alfabetización oceánica y las competencias azules. La economía azul es, por supuesto, un término muy usado y del que a veces se abusa para justificar infraestructuras que destruyen más naturaleza de la que sirven para proteger o incluso restaurar. Para preparar el terreno, Evelyn Paredes Coral, de la Universidad de Gante, presentó los principales resultados de un estudio sobre las aptitudes y actitudes en las profesiones marítimas. Los conocimientos son importantes para conseguir un empleo. En las entrevistas, los investigadores habían explorado las actitudes hacia la sostenibilidad oceánica, lo que se consideraría un uso legítimo del océano y la práctica de comportamientos respetuosos con el océano posiblemente basados en el interés personal por el océano. Los resultados del estudio mostraron claramente que los conocimientos sobre el océano no bastaban para desencadenar actitudes positivas. Otros panelistas se hicieron eco de esta afirmación, y también mostraron que las empresas necesitan fomentar las competencias blandas junto con las duras en sus empleados, que hay que buscar activamente las competencias "verdes" y la capacidad de cooperar. Farhat-Un-Nisá Bajwa, del Centro de Investigação Marinha e Ambiental, también subrayó que es necesaria la cooperación entre sectores, no sólo dentro de estrechos límites técnicos. Ruben Eiras, Secretario General de Fórum Oceano, opinó que los pescadores, especialmente los artesanales, ya deben tener muchos conocimientos interdisciplinarios y, por tanto, deberían desempeñar un papel importante en la configuración del futuro.
La siguiente sesión se centró en llevar el océano a las aulas. Francesca Santoro, de COI/UNESCO, se mostró especialmente elocuente al defender que no sólo hay que promover el conocimiento del océano, sino también las emociones, los valores humanistas, las actitudes positivas, el compromiso cívico y la capacidad de liderazgo. Otros se mostraron de acuerdo y añadieron que era importante trabajar con los municipios, a menudo a cargo de las escuelas primarias, y apoyar a los profesores. Todos coincidieron en que sería deseable una enseñanza transversal a las materias clásicas para obtener mejores resultados. También podría al menos empezar a abordar los retos más comunes, como la falta de tiempo y financiación y otras limitaciones relacionadas con la estructura del plan de estudios. Melita Mokos, Profesora Adjunta de la Universidad de Zadar, también recordó a los asistentes que, si bien en inglés se dispone de muchos medios didácticos, no ocurre lo mismo en muchas otras lenguas, y que a menudo los profesores carecen de formación práctica en esas otras lenguas.
Las dos sesiones de la tarde dieron paso a un debate entre artistas, medios de comunicación y personas influyentes sobre la mejor manera de involucrar a los ciudadanos y a los jóvenes en la alfabetización oceánica. Presentaron una serie de ejemplos para ilustrar lo que constituye una historia atractiva. Los ingredientes clave serían sobre todo buenos datos bien contados para que un destino humano tuviera rostro y no desapareciera en fríos números estadísticos.
Movimientos de la sociedad civil en las calles, en los medios sociales, sobre el terreno, como la campaña para detener el comercio de aletas de tiburón, con más de un millón de firmas respaldando la petición. La campaña contra la minería de aguas profundas contribuyó a que el Parlamento Europeo votara a favor de una moratoria. Los esfuerzos combinados de muchas organizaciones de conservación de la naturaleza difundiendo las últimas investigaciones sobre la nocividad de la pesca de arrastre de fondo para el medio marino y el clima han influido sin duda en la reciente decisión de prohibir la pesca de arrastre de fondo en las zonas marinas protegidas en virtud de la Directiva de Hábitats de la UE.
La otra mesa redonda, más orientada al futuro, reunió las ideas de niños, jóvenes, ciudadanos y público, los deseos y promesas de la red #MakeEUBlue, los resultados de otros actos de las Jornadas Europeas de los Océanos, así como las visiones de la Misión de la UE Océanos y Aguas y el Decenio de las Naciones Unidas para las Ciencias Oceánicas. No faltan ideas, convencionales o no. Es necesario poner el acento en la puesta en práctica de estas ideas en la vida cotidiana, en las escuelas, en las manifestaciones artísticas, en las instituciones públicas y privadas, en los laboratorios y en las calles.Las islas de alfabetización oceánica de la primera planta ofrecieron muchos más ejemplos de buenas iniciativas que emular y con las que colaborar (véanse las fotos de la derecha). Fue un día para cargar las pilas y seguir trabajando con energías renovadas.
Todas las fotos de Mundus maris asbl a menos que se indique lo contrario. Si desea más fotos y las grabaciones de los paneles de la jornada, haga clic aquí.