En este año una Oscilación del Sur "El Niño" (ENSO) excepcionalmente fuerte en el Pacífico está provocando la decoloración masiva de los corales. Se teme que el cambio climático aumente la frecuencia de este tipo de eventos - los corales viven ya cerca de su máxima temperatura.
Cuando se exponen al calentamiento los corales expulsan los organismos semejantes a las algas (zooxantelas) que viven en sus tejidos y les dan su típico color. El coral se volverá blanco, de ahí el término "blanqueo de los corales". El calentamiento prolongado mata el coral. Eso destruye no sólo los corales, sino también el hábitat de peces y otros organismos que forman el ecosistema coralino. Otros factores de estrés también pueden conducir a la decoloración. Después de estrés a corto plazo los corales pueden recuperarse.
El Niño de este año es particularmente extraño y temido para convertirse en el más grave desde que empezaron las observaciones científicas. Un calentamiento masivo se está acumulando en el Océano Pacífico Ecuatorial.
Quirin Schiermeier informa en un reportaje del 20 de octubre de 2015, en la revista científica Nature:
"El fenómeno meteorológico de un El Niño muy fuerte puede volcar las condiciones climáticas en el Pacífico y alterar profundamente la meteorología en todo el mundo. Ya se han sentido los impactos de éste Niño. Indonesia ha sufrido una sequía fulminante que ha intensificado los incendios en los bosques y tierras agrícolas, y los corales del Pacífico están sufriendo de una de las peores episodios de decoloración de la historia. Perú ha declarado el estado de emergencia en algunas regiones por la expectativa de inundaciones, y los agricultores en Australia se han puesto en alerta por una temida sequía."